El domingo por la tarde comenzó el Campamento de la Iglesia en la localidad burgalesa de Torme. Previamente, varios voluntarios acudieron el sábado para realizar el montaje de las distintas instalaciones: comedor, cocina, mochileros, tiendas, etc.
La zona donde se desarrolla el campamento es idílica, dada la numerosa vegetación, paisaje de ribera, etc. Unos ocho voluntarios, comandados por el incansable párroco Don Benito, se encargarán de vigilar y formar a los más de ochenta niños de Colindres, de edades comprendidas entre los ocho y los catorce años, que en dos turnos se van a dar cita durante los próximos quince días¡Que tengáis una feliz estancia!